Una vez conseguida correctamente la muestra de sangre procedemos a su análisis e interpretación. En este artículo hablaremos de la interpretación de las series celulares roja y blanca. La de la serie plaquetar ya apareció en otro artículo.
Serie roja
Informa acerca del recuento de eritrocitos, la concentración de hemoglobina, el hematocrito y una serie de índices que nos indican el tamaño medio de los hematíes (VCM), contenido medio en hemoglobina (CHCM y HCM), diferencia de tamaño entre los eritrocitos (RDW) o bien la cantidad de reticulocitos o eritrocitos inmaduros presentes. Según los valores de estos parámetros podemos ver diferentes tipos de alteraciones:
Anemia
Es la disminución del número total de eritrocitos, hemoglobina o hematocrito en relación a los valores fisiológicos.
Cuando detectamos un paciente anémico es importante clasificar correctamente la anemia en regenerativa (hemorrágica, hemolítica) o no regenerativa (causas extramedulares y medulares) con el fin de poder identificar la causa que la está produciendo. Para ello debemos fijarnos en el número de reticulocitos o formas eritrocitarias inmaduras que nos da el hemograma y compararlo con los valores de referencia que proporciona cada laboratorio en función de la especie. También es importante saber que la médula ósea tarda entre 48-72 horas en comenzar a regenerar. En algunas ocasiones el hecho de tener un VCM elevado (macrocitosis) asociado a un CHCM disminuido (hipocromía) puede ser sugestivo de regeneración, pero no en todas las anemias regenerativas lo vemos (también lo podemos encontrar en muestras antiguas o mal conservadas). También tenemos anemias semirregenerativas (ferropénicas, alternan periodos de regeneración y no regeneración). Consideraremos la presencia de regeneración o no junto con los hallazgos encontrados en el frotis (aglutinados, esferocitos, esquistocitos…) para buscar la etiología de la anemia (figura 1 ).

Figura 1. Esquistocito. Fragmentación mecánica (izq.). Eritrocitos aglutinados de perro. En las anemias inmunomediadas podemos encontrar VCM muy elevados (a pesar de la presencia de esferocitos con VCM disminuido, esto se debe a la presencia de estos aglutinados y de policromatófilos (dcha.).
Policitemia
Aumento del número total de eritrocitos, hemoglobina o hematocrito en relación a los valores fisiológicos. Clasificación:
- Relativa: sin alteración de la eritropoyesis.
- Absolutas: por aumento de la eritropoyesis.
Macrocitosis

Figura 2. Policromatófilos
de perro.
Aumento del volumen corpuscular medio (VCM). Causas:
- Sangre vieja o mal conservada (los hematíes pierden su permeabilidad selectiva y se hinchan
- Forma fisiológica en algunos caniches (macrocitosis hereditaria).
- Presencia de precursores eritrocitarios o policromatófilos (reticulocitos) (figura 2).
- Otros: FelV (gatos).
Microcitosis
Disminución del VCM. Causas:
- Fisiológica en ciertas razas de perro: Shar Pei, Akita, Shiba Inu y Chow Chow.
- Anemias ferropénicas (perro).
- Shunt portosistémico.
Hipocromía
Glóbulos rojos con menor contenido en hemo-globina de lo normal. Viene representada por la concentración media de hemoglobina corpuscular (CHCM) y la hemoglobina corpuscular media (HCM). Causas:
- Anemias regenerativas: los policromatófilos contienen menos hemoglobina que los eritrocitos maduros.
- Anemias ferropénicas (disminuye la síntesis de hemoglobina) asociadas a microcitosis (por presencia de esquistocitos).
Hipercromía
La hipercromía siempre es secundaria a artefactos (un hematíe nunca puede contener mayor cantidad de hemoglobina que la fisiológica): hemólisis (por manejo o secundaria a una anemia hemolítica intravascular), lipemia o presencia de cuerpos de Heinz.
Anisocitosis
Indica la presencia de hematíes de diferente tamaño. A este concepto hace referencia la distribución de hematíes (RDW).
Serie blanca
El leucograma nos informa sobre el número total de leucocitos y el valor absoluto y porcentual de cada tipo (neutrófilos, linfocitos, monocitos, eosinófilos y basófilos). Es importante realizar la interpretación siempre en función del valor absoluto. Se recomienda verificar los hallazgos del leucograma que nos ha proporcionado el analizador con los dot plots y con la observación microscópica del frotis, sobre todo si sospechamos de formas inmaduras o anormales. A continuación exponemos las alteraciones más frecuentes.
Leucocitosis
Aumento del número total de leucocitos por encima de los valores de referencia fisiológicos para la especie.
Leucopenia
Disminución del número total de leucocitos por debajo de los valores de referencia fisiológicos para la especie.
Neutrofilia
Aumento del número de neutrófilos por encima de los valores de referencia fisiológicos para la especie. Causas:
- Por liberación de epinefrina (excitación, miedo, estrés, ejercicio, extracciones de sangre en la consulta). Duración transitoria de 20-30 minutos.
- Niveles elevados de corticoides (estrés crónico por enfermedad, síndrome de Cushing o administración exógena). Neutrofilia de estrés (asociada a monocitosis, linfopenia y eosinopenia).
- Neutrofilia inflamatoria: secundaria a infecciones, tumores, procesos inmunomediados, físico-químicos, etc.
- Leucemias.

Figura 3. Neutrófilo
en banda o cayado.
Debemos confirmar si hay o no desviación a la izquierda (neutrófilos inmaduros en banda o cayados (figura 3) por encima del valor de referencia y otros precursores como metamielocitos o mielocitos) así como la presencia o no de cambios tóxicos (cuerpos de Döhle, basofilia o vacuolización citoplasmática, núcleo en anillo, etc.). La desviación a la izquierda asociada a neutrofilia, neutropenia o valor numérico en rango y los cambios tóxicos son indicativos de inflamación. Además de servirnos para el diagnóstico nos ayuda a establecer un pronóstico y a monitorizar tratamientos.
Neutropenia
Disminución del número de neutrófilos por debajo de los valores de referencia fisiológicos para la especie. Causas:
- Inflamación sobreaguda, grave, sepsis, que suele ir asociada con desviación a la izquierda degenerativa (el número de neutrófilos inmaduros es superior al de neutrófilos maduros).
- Disminución de la producción en la médula ósea: infecciones, fármacos, neoplasias, necrosis de la médula, hematopoyesis cíclica del Collie…
- Destrucción periférica (inmunomediada).
- Secuestro por shock endotóxico, anafiláctico, anestesia, etc.
Linfocitosis
Aumento del número de linfocitos por encima de los valores de referencia fisiológicos para la especie. Causas:
- Fisiológica en animales jóvenes (sobre todo en gatos).
- Inducida por liberación de epinefrina.
- Estimulación antigénica prolongada (posvacunal, infecciones/inflamaciones crónicas).
- Ehrlichiosis.
- Enfermedades linfoproliferativas.
Linfopenia
Disminución del número de linfocitos por debajo de los valores de referencia fisiológicos para la especie. Causas:
- Niveles elevados de corticoides (leucograma de estrés).
- Enfermedades víricas.
- Pérdida de linfa rica en linfocitos (quilotórax).
- Inmunodepresión por radiación y quimioterápicos.
Eosinofilia
Aumento del número de eosinófilos por encima de los valores de referencia fisiológicos para la especie. Causas: hipersensibilidad, enfermedades parasitarias, etc.
Monocitosis
En general la podemos ver asociada a cualquier inflamación o bien como parte del leucograma de estrés. Recuentos muy elevados pueden sugerir leucemias; se debe evaluar bien el frotis para descartar o confirmar la presencia de células blásticas (las células inmaduras de la médula ósea).
Basofilia
Es rara. Puede verse en hipersensibilidad y parasitosis junto con la eosinofilia o bien en leucemias basofílicas (más infrecuente).
Extraído de: Nieves Sanz Torres, La interpretación del hemograma, Ateuves nº 60, págs. 20-23.
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